Geomorfología y Relieve






En el área de estudio existen dos sectores diferenciados en cuanto a litología y estructura: la cuenca terciaria del Ebro y los relieves mesozoicos. Es por ello que los procesos geomorfológicos que han tenido lugar y las formas resultantes son diferentes en ambas zonas.

En los relieves mesozoicos el proceso más importante que ha tenido lugar durante el Cuaternario es la erosión diferencial de los materiales; los más lábiles ( arcillas, lavas, arenas,..) han sido erosionados y evacuados en mayor medida que aquellos más resistentes a la erosión física (calizas, dolomías,...). como la estructura predominante es la de pliegues suaves con buzamientos menores de 30°, las formas principales de relieve consisten en plataformas estructurales ( cuando los estratos se encuentran en disposición subhorizontal) y, sobre todo, cuestas (cuando los buzamientos de los estratos son leves). En el reverso de las cuestas se pueden llegar a formar chevrons, por acción de los barrancos que cortan los estratos. Sin embargo, cuando los buzamientos son mayores se forman hog-backs y en el caso extremo de buzamientos verticales, barras.

Otro fenómeno que se da con frecuencia en este sector es la fuerte incisión lineal de los ríos, los cuales profundizan en los materiales mesozoicos disectando su estructura de un modo más o menos perpendicular. El resultado es la formación de gargantas y hoces, como por ejemplo las del Guadalope en los Órganos de Montoro.

Las calizas más puras presentan locamente signos de karstificación, que se manifiesta exteriormente a modo de lapiaces. Internamente todo el macizo presenta así mismo un cierto endokarst, con galerías y cavidades.

El Terciario de la cuenca del Ebro, excepto el Paleógeno próximo a los relieves mesozoicos, es de una mayor sencillez estructural. Los estratos se encuentran en disposición subhorizontal o presentan leves buzamientos, con lo que las formas dadas por la erosión son plataformas estructurales o suaves cuestas de congomerados.

Sobre ambos sectores, la escasa evolución lateral de los ríos que surcan el área ha originado depósitos de terrazas en el Guadalope, a las que acuden glacis de escasa importancia. Los depósitos de ladera tienen así mismo poca relevancia y se circunscriben a los frentes de las sierras



Texto escrito por: Laura Ayora