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Más de 150 establecimientos aragoneses forman parte del Sicted

Tener un plan de limpieza u ofrecer una factura detallada son sólo algunos de los requisitos que deben cumplir los establecimientos que se adhieran al Sistema Integal de Calidad Turística Española en Destinos (Sicted). Una iniciativa que ya está presente en más de 150 establecimientos aragoneses.

Tener un plan de limpieza, un registro de reservas u ofrecer una factura detallada son sólo algunos de los requisitos que deben cumplir los establecimientos que forman parte del Sistema Integral de Calidad Turística Española en Destinos (Sicted).

Una iniciativa puesta en marcha desde el Gobierno central y que ya está presente en más de 150 establecimientos aragoneses que se ubican en comarcas como, por ejemplo, Gúdar-Javalambre, Maestrazgo, Matarraña, Albarracín o Tarazona y el Moncayo. Además, el proyecto sigue ganando adeptos y también está presente en la provincia de Huesca. La zona de Jaca y del Valle del Aragón lleva desde el año 2004 trabajando en este proyecto y, ahora, es la Comarca de la Ribagorza la que ha decidido poner en marcha este sistema.

El Sicted ayuda a las empresas turísticas a alcanzar un nivel mínimo de calidad y, para ello, deben cumplir una serie de requisitos y buenas prácticas. Será en enero cuando este sistema se empiece a implantar en la Ribagorza. La técnico de Turismo, Cristina Navarro, ha incidido en que lo que va a distinguir a la Comarca en términos de competitividad y turismo es que “la Ribagorza es pionera en la provincia en adherirse a este proyecto”.

Los establecimientos que forman parte del Sicted reciben formación y pasan un control anual para verificar que mantienen los niveles necesarios de calidad. Las empresas deben cumplir una serie de requisitos en varias áreas: personal contratado, clientes, ventas, servicios externos e instalaciones.

La técnico de Turismo del Maestrazgo, Cristina Mallén, lleva desde el año 2007 promoviendo este proyecto y asegura que es un sistema de calidad “sencillo y fácil de cumplir" en el que se exigen medidas como “que cuando se incorpore un trabajador se le informe de sus funciones, que haya un plan de formación anual para el personal, que exista un sistema de encuestas, un lugar donde registrar objetos perdidos y que en las habitaciones exista material de lectura sobre el destino, entre otras muchas cosas”, ha concluido Mallén.